Detección y diagnóstico del cáncer de mama
A menudo, el cáncer de mama no presenta síntomas, por lo que es fundamental someterse regularmente a pruebas de detección. Aunque un bulto duro en la mama es uno de los síntomas, el cáncer de mama puede detectarse mucho antes, cuando es más fácil de tratar, mediante una mamografía.
La mamografía es la forma más eficaz de detectar precozmente el cáncer de mama. La detección precoz aumenta las probabilidades de éxito del tratamiento. Si en una mamografía rutinaria se detecta una zona anormal, se realizará una mamografía diagnóstica y posiblemente una ecografía mamaria para investigar más a fondo y determinar si hay cáncer. También es importante tener en cuenta que el cáncer no siempre se diagnostica cuando se detecta una zona anormal en la mama. La única forma de saberlo con seguridad es mediante pruebas adicionales.
Los especialistas en cáncer de mama de Virginia Oncology Associates han creado esta guía en vídeo sobre el cribado del cáncer de mama.
Mamografía: La norma para la detección precoz del cáncer de mama
Una mamografía es una imagen de rayos X de los tejidos del interior de la mama. Las mamografías a menudo pueden mostrar un bulto en la mama antes de que se pueda palpar. También pueden mostrar un grupo de pequeñas motas de calcio. Estas manchas se denominan microcalcificaciones. Los bultos o motas pueden deberse a un cáncer, a células precancerosas o a otras afecciones. Se necesitan más pruebas para averiguar si hay células anormales.
El cribado del cáncer de mama se rige por el nivel de riesgo y va de medio a alto. Para ayudar a determinar su nivel de riesgo, el Colegio Americano de Radiología (ACR) y la Sociedad de Imagenología Mamaria (SBI) recomiendan a todas las mujeres hablar con su médico alrededor de los 25 años para determinar su riesgo de cáncer de mama y la edad adecuada para comenzar el cribado.
Las mamografías periódicas para detectar precozmente el cáncer de mama deberían formar parte de la rutina sanitaria habitual de toda mujer una vez alcanzada la edad para someterse a ellas.
Las recomendaciones para el cribado se basan en si usted se considera de riesgo medio o alto.
Cómo determinar si tiene un riesgo elevado de cáncer de mama
Las mujeres con mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama sólo tienen que cumplir uno de los siguientes criterios:
- Tener una madre, hermana o hija, considerada familiar de primer grado, que haya padecido cáncer de mama. El riesgo también aumenta si tiene varios familiares por parte de madre o padre que hayan padecido cáncer de mama o de ovario.
- Tener tejido mamario denso
- Mutaciones hereditarias de los genes BRCA1 o BRCA2
- Exposición a radiación torácica antes de los 30 años
- Otras situaciones de alto riesgo determinadas por su proveedor
Su médico puede pedirle que rellene un cuestionario de riesgo de cáncer de mama para calibrar su riesgo a lo largo de la vida. Si su riesgo a lo largo de la vida es del 20% o superior, es posible que le sugieran que siga un proceso de cribado de alto riesgo. Este proceso podría incluir la vigilancia mediante resonancia magnética y mamografías anuales a partir de los 25 años, dependiendo de su tipo de riesgo.
Hablar con su médico sobre su riesgo de padecer cáncer de mama puede ayudarle a determinar el momento adecuado para iniciar las pruebas de detección del cáncer de mama.
Cribado del cáncer de mama en mujeres de riesgo medio
La Sociedad Americana del Cáncer (ACS ) afirma que las mujeres consideradas de riesgo medio de desarrollar cáncer de mama son aquellas que no tienen antecedentes personales de cáncer de mama, ni antecedentes familiares de cáncer de mama, ni mutación genética conocida (BRCA-1 o BRCA-2). Para esta categoría, la ACS recomienda el siguiente programa de cribado del cáncer de mama:
- Mujeres de 40-44 años*: mamografías anuales opcionales
- Mujeres de 45-54 años: mamografías anuales
- Mujeres de 55 años o más: si gozan de buena salud, mamografías anuales o bienales (cada dos años).
*A partir del 30 de abril de 2024, el Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de los Estados Unidos (USPSTF) recomienda que todas las mujeres empiecen a hacerse mamografías a los 40 años. Para recomendaciones específicas, hable con su médico.
El cribado debe continuar mientras la mujer goce de buena salud y se espere que viva al menos diez años más.
Si nunca se ha hecho una mamografía, lea más sobre qué esperar en su primera mamografía.
¿Qué ocurre si la mamografía muestra una zona anormal?
Si la mamografía muestra una zona anormal en la mama, el médico puede solicitar imágenes más claras y detalladas de esa zona. Los médicos utilizan las mamografías diagnósticas para obtener más información sobre cambios inusuales en la mama, como un bulto, dolor, engrosamiento, secreción del pezón o cambio en el tamaño o la forma de la mama. Las mamografías diagnósticas pueden centrarse en una zona específica de la mama. Pueden requerir técnicas especiales y más vistas que las mamografías de cribado.
Los médicos también pueden utilizar otros métodos de diagnóstico por imagen para obtener más información sobre el bulto u otras zonas inusuales.
- Ecografía mamaria: Una mujer con un bulto u otro cambio en la mama puede someterse a una ecografía. Un aparato de ultrasonidos emite ondas sonoras que las personas no pueden oír. Las ondas rebotan en el tejido mamario. Un ordenador utiliza los ecos para crear una imagen. La imagen puede mostrar si un bulto es sólido, está lleno de líquido (un quiste) o es una mezcla de ambos. El radiólogo determinará si es necesario realizar una biopsia o más pruebas de imagen.
- Resonancia magnética de mama: La IRM utiliza un potente imán conectado a un ordenador. Permite obtener imágenes detalladas del tejido mamario. Estas imágenes pueden mostrar la diferencia entre el tejido normal y el enfermo.
Si se sospecha cáncer de mama, lo siguiente es una biopsia de mama
Una biopsia es la extracción de tejido de la mama para ver si hay cáncer. Una biopsia es la única forma de saber con seguridad si hay células cancerosas.
Su médico puede remitirla a un cirujano o a un especialista en enfermedades mamarias para que le hagan una biopsia. El cirujano o el médico extraerá líquido o tejido de su mama de una de las varias maneras:
- Biopsia por aspiración con aguja fina: el médico utiliza una aguja fina para extraer células o líquido de un nódulo mamario.
- Biopsia central: el médico utiliza una aguja ancha para extraer una muestra de tejido mamario.
- Biopsia de piel: Si hay cambios en la piel de la mama, el médico puede tomar una pequeña muestra de piel.
- Biopsia quirúrgica: El cirujano extrae una muestra de tejido.
- Una biopsia incisional toma una parte del bulto o de la zona anormal.
- En la biopsia por escisión se extrae todo el bulto o la zona anormal.
Un patólogo examinará el tejido o el líquido extraído de la mama en busca de células cancerosas. Si encuentra células cancerosas, el patólogo también describirá otras características del cáncer, como el tipo de cáncer de mama y el estado hormonal.
Tenga en cuenta que una biopsia no es un diagnóstico automático de cáncer. Los resultados de la biopsia pueden indicar la presencia de una enfermedad no cancerosa. Normalmente, los resultados de la biopsia tardan unos días en llegar.
Pruebas de laboratorio con tejido mamario
Si se le diagnostica cáncer de mama, se realizan pruebas adicionales en el tejido mamario para ayudar a orientar su plan de tratamiento. Estas pruebas pueden incluir:
- Pruebas de receptores hormonales: Algunos tumores de mama necesitan hormonas para crecer. Estos tumores tienen receptores para las hormonas estrógeno, progesterona o ambas. Si las pruebas de receptores hormonales muestran que el tumor de mama tiene estos receptores, lo más frecuente es que se recomiende la terapia hormonal como opción de tratamiento.
- Prueba HER2/neu: La proteína HER2/neu se encuentra en algunos tipos de células cancerosas. Esta prueba muestra si el tejido tiene demasiada proteína HER2/neu o demasiadas copias de su gen. Si el tumor de mama tiene demasiada HER2/neu, la terapia dirigida puede ser una opción de tratamiento.
Obtenga más información sobre el papel que desempeña el estado hormonal en el cáncer de mama.
Los resultados de estas pruebas pueden tardar varios días en llegar. Estos resultados ayudan a su médico a decidir qué opciones de tratamiento del cáncer de mama son las mejores para usted.
Examen clínico de las mamas (ECM) y autoexamen de las mamas (AEM)
Aunque la Sociedad Americana del Cáncer ya no recomienda los exámenes clínicos de mama ni los autoexámenes de mama como parte de un programa de cribado regular, esto no significa que no deban realizarse nunca. Muchos médicos siguen realizando exámenes clínicos de las mamas a sus pacientes como parte de sus programas de cribado. Hable con su médico para ver si esto es apropiado en su caso. Además, la mayoría de los médicos animan a sus pacientes a estar atentas a cualquier cambio que puedan notar en sus mamas e informar de ello inmediatamente.